La gran demanda de máscaras faciales en todo el mundo incrementó sus variedades, formas, colores y lo más importante, materiales.
Por ello científicos de la Universidad Duke decidieron poner a prueba la eficacia de estas, haciendo una investigación con 14 mascarillas diferentes, y determinar así, si estas suprimen la propagación de las gotitas respiratorias durante el habla regular.
El experimento pretende demostrar la efectividad de las máscaras mediante un método super económico:
El hardware para las mediciones está comúnmente disponible, mientras que los laboratorios cuentan con láseres y componentes ópticos adecuados para distintas investigaciones, y que serán implementados en este estudio, estos también se pueden comprar por menos de $200 dólares.
Utilizaron una cámara de teléfono como dispositivo de filmación, los científicos aseguran que la configuración es simple, y puede ser construida y operada.
Las mascarillas se pusieron a prueba de esta forma:
De forma común, el sujeto de prueba se colocó las diferentes mascarillas, y luego se posicionó en el sistema de experimentación.
Comenzó a hablar para desprender las pequeñas gotas de saliva que son expulsadas de manera inadvertida al hablar, o toser.
A través del láser se observaron las pequeñas partículas despedidas mientras usaba las diferentes mascarillas:
Los científicos de la Universidad Duke, consideran que con este estudio se pueden realizar importantes comparaciones sobre los materiales de las diferentes mascarillas, y que este estudio puede ser replicado en cualquier laboratorio para certificar la efectividad de las mascarillas más comunes a la venta.
Máscara KN95, transmisión de partículas de menos de 0.1%:
Una mascarilla KN95 ajustada, provee gran seguridad tanto para el usuario como para las personas que se encuentren alrededor, dejándola en el primer lugar de la lista.
Sin embargo, la máscara KN95 con válvula de exhalación, diminuye la protección de las personas que lo rodean:
La válvula de exhalación no compromete la seguridad del usuario, pero disminuye la protección de las personases que lo rodean en comparación, ya que esta válvula se abre para dejar salir un flujo de aire hacia afuera.
Mascarilla quirúrgica de 3 capas:
Estas mascarillas mostraron un resultado positivo, y fueron aprobadas por los científicos por su capacidad de detener la propagación del coronavirus en el segundo lugar.
Las máscaras de tela tejida tuvieron un mal desempeño:
Las máscaras tejidas marcaron una transmisión de partículas de 0.6%, tomando en cuenta que la cantidad de partículas desprendidas sin máscara es de 1,0% a más, el porcentaje es bastante elevado.
Las máscaras de polipropileno ocuparon el tercer lugar en cuanto a la protección contra el virus:
Las fibras de polipropileno tienen un diámetro de unos 5 micrómetros, por ello la eficacia de las mascarillas de este tipo de mascarilla depende del espesor del filtro, mientras más grueso sea, mayor será el número de virus y bacterias “capturados”.
A esto se debe añadir un buen ajuste de estas en el rostro.
Las máscaras de algodón que se pueden hacer en casa también funcionaron muy bien:
En otro estudio realizado para probar la efectividad de este tipo de mascarilla, los investigadores determinaron que mientras un estornudo puede viajar hasta 3,6 metros sin ninguna protección, con una mascarilla de algodón acolchado, las gotas solo se extendieron 6 centímetros (CNN).
Su efectividad también dependerá de su buen ajuste en el rostro.
La gran perdedora fue el pañuelo de vellón (lana), pues al contrario empeora las circunstancias:
El material descompuso las gotas grandes en pequeñas y estas se esparcieron el aire con mayor facilidad.
Los investigadores de la Universidad Duke, dijeron estar sorprendidos al descubrir que este tipo de mascara improvisada excedía la cantidad de partículas medidas comparadas con la prueba sin máscara.
Las bandanas de tela no aportan mucha protección tampoco:
Aunque no sobrepasan la cantidad de partículas de la prueba sin máscaras, estas no son para nada recomendables, su porcentaje de transmisión varía de 0,2 a 1%.
Las máscaras de tela con una capa no se destacaron en el experimento.
Es mejor contar con máscaras con filtros que mejoren la protección.
Lo mejor es evitarlas y usarlas sólo cuando no quede más remedio.
El pañuelo de algodón doblado permite que las partículas viajen hasta 39 centímetros:
En comparación un pañuelo de una sola capa permite que las partículas se propaguen 90 centímetros.
Sin embargo es menos usado que las mascarillas sin filtro.
Así es como lucen las partículas de las diferentes mascarillas procesadas en la computadora:
La primer muestra sin protección, versus con mascarilla de algodón, quirúrgica, y pañuelo de vellón.
Este fue el resultado que los científicos determinaron según cada mascarilla:
El segundo cuadro (Izquierda) muestra en verde el nivel de dispersión de las partículas sin mascarilla, en rojo con bandana, mascarilla de algodón en naranja.
Por supuesto, es importante usar las mascarillas de manera correcta.
Cuiden su salud y la de los demás, y no hagan lo que Ben Affleck hizo…
Anisk
Mi nombre es Ana, me encanta escribir post de curiosidades e historias sobre casos reales y misteriosos, Snowy también es mi gata, y estamos obsesionados con ella.
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