A raíz de la muerte del Papa Francisco, varios medios han recordado el caótico funeral del Papa Pio XII.
A continuación te explicamos qué fue lo que sucedió en este polémico capítulo de la Iglesia Católica.
1. "No quiero ser embalsamado"

Pío XII murió a los 82 años debido a una insuficiencia cardíaca.
El Papa, había manifestado su deseo de no ser embalsamado y esperaba ser perseverado en la misma manera “en la cual Dios lo creó”.
2. Su médico resultó ser un 'charlatán'

El médico, Riccardo Galeazzi-Lissi, convenció al Vaticano de que intentaran un ‘método alternativo’.
El médico se jactaba de haber inventado la “osmosis aromática”, que supuestamente embalsamaba un cuerpo de manera ‘natural’.
3. Lo cubrieron en aceites y celofán

El médico sumergió el cuerpo del Papa en una combinación de aceites, hierbas aromáticas y resinas para desoxidar el cuerpo.
Además, lo cubrió con celofán durante 24 horas.
Su método parecía haber dado resultado.
4. Se hinchó y se puso oscuro

El cuerpo fue llevado al palacio Castel Gandolfo, para ser visitado por cardenales y fieles.
Sin embargo, en cuestión de minutos comenzó el desastre.
La piel se arrugó de inmediato y se empezó a descomponer a vista de todos.
Testigos afirman que vieron como el cuerpo se hinchó en la zona del vientre y comenzó a despedir un olor fétido.
5. Terminó explotando en el traslado

Galeazzi optó por colocar el cuerpo en un ataúd que empeoró las cosas.
Cuando el cuerpo era trsladado a la basílica de San Pedro, se escuchó un estruendo al interior del ataúd.
El tórax se había reventado parcialmente y había filtraciones de vísceras.
6. Le hicieron una máscara de cera

Galeazzi fabricó una máscara de cera para ocultar el tabique caído y las mejillas rasgadas.
Los fieles lo vieron desde cierta distancia, y utilizaron una luz tenue para ocultar los detalles horrorosos.
Finalmente, Pio fue enterrado en las grutas vaticanas, mientras que Galeazzi Lissi fue expulsado del Vaticano y acusado de traición.
7. Intentó vender una foto del cuerpo

Galeazzi-Lisi intentó vender fotos del Papa en su lecho de muerte, con precios que iban desde $1,600 hasta $13,300 dólares.
Esto fue considerado una violación ética, sin embargo, los diarios italianos, ‘Il Tempo’ y ‘La Stampa’, adquirieron las fotos.