Estas personas buscaron la manera de ir a prisión, o aumentar sus sentencias para lograr metas un poco tontas. Lo cierto es que estas personas de alguna manera descubrieron que mejor la pasaban adentro que afuera.
Aunque algunos motivos son un poco tristes, otros motivos te provocarán una carcajada. A continuación te presentamos los casos.
1. Pidió 3 años extra de prisión para aumentar a su sentencia de 30 años, y así honrar a su jugador de basketball favorito que usa el número 33:
En 2005, Eric Torpy fue condenado a 30 años de prisión por disparar con la intención de terminar con la vida de una persona mientras cometía un robo, pidió a la juez que le diera 3 años extra, para que su condena coincidiera con el número de camiseta de Larry Bird, la solicitud fue aprobada.
6 años más tarde, Eric se arrepintió, y dijo que solo estaba bromeando en ese momento, ahora desea poder salir en el 2033.
2. Lance Brown lanzó un ladrillo al tribunal de justicia para ser arrestado de inmediato:
Brown estuvo en prisión por robo a un banco, y unos años después cuando fue liberado, se dio cuenta de que la vida era más difícil afuera, así que decidió cometer un crimen para ser devuelto.
Fue encarcelado por 1 mes, y 3 años de libertad condicional, dijo que cometió el crimen porque tenía hambre y no tenía dónde quedarse, la corte decidió no darle la sentencia de hasta 10 años, para no buscar imitadores que hagan actos similares por recibir comida y refugio gratis
3. Robó un banco para escapar de su mujer y fue sentenciado a prisión domiciliaria:
Lawrence John Ripple admitió que quería ir a prisión para estar muy lejos de su mujer, pues había peleado con ella esa mañana y por ello decidió robar el banco.
El juez le dio prisión domiciliaria porque se determinó que tenía problemas de salud mental, sufría depresión y se había sometido a una cirugía cardiaca dos años antes.
4. Robó 1 dólar al banco para tener asistencia médica en prisión:
James Verone llegó al cajero y le dio una nota que decía “esto es un robo. Por favor, solo déme un dólar”. El cajero extrañado le dio el dólar, y este luego fue a sentarse para esperar a la policía.
Los investigadores revelaron que cometió el crimen para recibir atención médica gratuita, pues tenía un bulto en el pecho y múltiples heridas en la espalda y el pie, había perdido su trabajo y no tenía más dinero de sus ahorros, cómo último recurso decidió cometer el crimen.
6. Tenía arresto domiciliario y rompió su condena para ir a prisión y alejarse de su esposa:
Walid Chaabani tenía delitos por posesión de sustancias controladas, pero cuando comenzó a tener problemas con su esposa, infringió su arresto.
El hombre le pidió a la policía completar su condena en prisión porque vivir con su esposa era “particularmente difícil e insoportable”
7. Imitaron el robo de 1 dólar, para recibir atención médica:
Timothy Dean imitó el robo de James, pidió al cajero 1 dólar y luego este espero a la policía.
Él alegó que necesitaba ayuda médica y que como era una persona sin hogar, intentó pedir ayuda a los transeúntes y llamar al 911 para fingir que había sido atropellado, pero nadie le prestó atención.
8. Pidió seguir una semana extra en prisión para conocer al jugador Francesco Totti:
El jugador de fútbol Italiano escribió en su autobiografía, que durante una visita a una cárcel en 2006, un reo comenzó a gritar “¡Yo! ¡Yo! ¡Yo!” mientras se abría paso a través de los prisioneros para conocerlo y tomarse una fotografía.
Los guardias más tarde le contaron que él debía ser liberado hace 1 semana, pero pidió quedarse para conocer a Totti, amenazando con “hacer algo muy loco” si no le aceptaban la solicitud.
9. Fue a prisión para ser operado de un tumor cerebral y recibir tratamiento especial por su autismo:
Bradley Grimes fue encarcelado en un intento de “salvar su vida” según dijo el juez, pues este era una persona sin hogar que no lograba conseguir un empleo debido a su autismo.
Bradley Grimes ha sido encarcelado en múltiples ocasiones debido a su condición.
Anisk
Mi nombre es Ana, me encanta escribir post de curiosidades e historias sobre casos reales y misteriosos, Snowy también es mi gata, y estamos obsesionados con ella.
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