El caso de Timothy es considerado uno de los errores judiciales más grandes en el sistema legal de Gran Bretaña, y esto cambiaría el rumbo de la historia.
A continuación, te traemos una historia curiosa ambientada en 1949, que culmina con un cambio legal que pudo haber salvado a miles de personas:
En 1953, un hombre realizó un terrible descubrimiento mientras cambiaba el papel tapiz de su cocina:
Un hombre decidió hacer refacciones en el departamento que estaba alquilando, pues un terrible olor inundaba toda la cocina. Cuando comenzó a quitar el viejo papel tapiz, descubrió una pequeña puerta escondida.
En una especie de despensa, descubrió los cuerpos de 3 mujeres, y la policía posteriormente encontró una cuarta mujer debajo del piso en la sala de estar. Las 3 primeras mujeres habían sido abusadas y estranguladas, pero aún faltaban más por encontrar.
Timothy Evans era un joven analfabeto, que no tuvo una infancia fácil, y se refugiaba en las mentiras para ser “aceptado”:
Nació en 1924, fue abandonado por su padre, y siendo aún un niño, se vio afectado por una llaga tuberculosa en el pie derecho, que le imposibilitó caminar adecuadamente.
Como consecuencia, el pequeño Timothy se vio obligado a dejar la escuela por periodos muy largos de tiempo. Evans era prácticamente analfabeto, apenas podía leer y escribir su nombre.
Debido a su incapacidad para conectar con las personas, se convirtió en un mentiroso compulsivo, con la finalidad de agradar a las personas que conocía, y disfrutar de esos pequeños momentos de “aceptación”.
Timothy se casó y tuvo una hija, pero los problemas monetarios comenzaron a provocar peleas en su matrimonio:
Timothy y su esposa Beryl, junto a su pequeña hija, Geraldine, decidieron mudarse al 10 Rillington Place, un pequeño edificio de apartamentos en una zona pobre y peligrosa del barrio londinense de Notting Hill.
Timothy vivía junto a su familia en el tercer y último piso. Era común para el resto de los vecinos, escucharlos pelear muy a menudo, por la falta de dinero y por el creciente alcoholismo de Timothy. Estas peleas a veces se volvían físicas.
Beryl descubrió que estaba embarazada nuevamente y decidieron interrumpir el embarazo
La falta de dinero con una sola hija era algo insostenible, Timothy y su esposa decidieron interrumpir el embarazo, pero esto era ilegal en Gran Bretaña en ese momento.
La pareja estaba pasando un mal momento, tenían préstamos que pagar, debían el alquiler, y Timothy no encontraba un buen trabajo para pagar las deudas.
Un vecino le aseguró a Timothy que lo ayudaría con su “problema”:
En la planta baja, vivía un hombre mayor llamado John Reginald Christie, junto a su esposa. Este hombre era respetado por la comunidad pues era un héroe de guerra y siempre se mostraba interesado en ayudar a los demás.
John Christie, que ya había formado una amistad con su joven vecino, le aseguró a Timothy que se había formado como médico antes de la Segunda Guerra Mundial, y que podría realizar el procedimiento de interrupción del embarazo para su esposa. Timothy y Beryl aceptaron desesperados, pero las cosas salieron mal.
Timothy no soportó el cargo de consciencia, y aseguró a la policía que le había quitado la vida a su mujer:
El 7 de noviembre de 1949, Timothy aseguró que conoció a un hombre que le dio pastillas ab0rtiv@s. Este se las entregó a su mujer, y cuando volvió del trabajo, la encontró sin vida.
Aseguró que entró en pánico, y que lanzó el cuerpo de su esposa a una alcantarilla, para luego dejar a su bebé al cuidado de buenos samaritanos anónimos, y huir a Gales.
La policía buscó el cuerpo donde Timothy aseguró haberlo dejado, pero estos no encontraron nada. Cuando lo confrontaron, cambió su confesión.
Luego Timothy aseguró que su mujer falleció en manos de John Christie, pero este negó todo:
Cuando Timothy regresó del trabajo, John Christie lo estaba esperando fuera del edificio, “Son malas noticias, no funcionó” relató que este le dijo.
Christie le aseguró que se desharía del cuerpo de la mujer mientras él estaba ausente en el trabajo. Que enviaría a la bebé a una pareja anónima que cuidaría de ella, y le aconsejó que vendiera sus muebles para huir, pues estaría en problemas si la policía se enterara del procedimiento ilegal que habían intentado hacer.
Cuando la policía investigó a Christie, este negó saber sobre el paradero de Beryl, y tanto él como su mujer, relataron que era común escuchar a Timothy pelear con su esposa.
La policía encontró los cuerpos de Beryl y su hija, envueltas en un mantel:
Luego de que la policía hiciera una requisa en casa de los Christie, sin encontrar nada, hicieron una segunda búsqueda en los alrededores del pequeño edificio, y encontraron los cuerpos de ambas dentro de un cobertizo.
En una tercera entrevista, la policía le relató a Timothy sobre los cuerpos de su esposa e hija encontrados, y cuando le preguntaron si era responsable de las mu3rt3s, este respondió afirmativamente.
Poco después volvió a retractarse, pero en el juicio en su contra, fue encontrado culpable y 3 meses después fue llevado a una cámara de ejecución, en el que fue colg@d0, al parecer, siendo INOCENTE.
John Christie sedó a Beryl con un extraño artefacto que había creado, y ella no fue su primera, ni última víctima:
John preparó a Beryl para el procedimiento en su casa, y les pidió a todos que lo dejaran a solas. Colocó un artefacto que despedía una serie de gases sedantes y dejó inconsciente a Beryl.
John procedió a abusar de la mujer, pero esta se despertó e intentó defenderse. El hombre terminó quitándole la vida, ahorcándola, e hizo lo mismo con la pequeña bebé al día siguiente.
Le dijo a Timothy que el procedimiento había fallado, y que envío a Geraldine a una pareja anónima para que cuidara de ella. Aconsejó a su joven vecino que vendiera sus muebles para recaudar dinero y huir.
El hombre que se mudó a su apartamento fue quien descubrió su macabro escondite:
Gracias a Beresford Brown, (el hombre que se mudó al macabro apartamento), las familias de las víctimas de John Christie encontraron “justicia”. Las mujeres dentro de la casa fueron reportadas desaparecidas entre 1952 y 1953, entre ellas también estaba su esposa.
En el jardín encontraron los restos de una mujer de 21 años desaparecida en 1943, y de otra mujer de 34 años desaparecida en 1944.
Christine confesó haber m@t@d0 a las 6 mujeres y fue ejecut@d0 en 1953, pero solo fue acusado de quitarle la vida a su mujer. En 1965, Reino Unido, eliminó las ejecuciones debido al resurgimiento del caso (gracias a un libro sobre Timothy), y en 1966 Timothy fue indultado de sus crímenes, la familia Evans recibió una compensación.
Anisk
Mi nombre es Ana, me encanta escribir post de curiosidades e historias sobre casos reales y misteriosos, Snowy también es mi gata, y estamos obsesionados con ella.La DEPRAVADA Fiesta De Madame Rothschild