Chester Bennington fue una de las voces más reconocidas y emblemáticas del rock moderno.
Lastimosamente, el éxito no fue solución para los problemas emocionales que el cantante sufría.
Así fue como vivió durante el último año:
Esto enfureció a Bennington y respondió que gracias a ellos el Metal seguía existiendo.
Este comentario añadió más leña al fuego y se reportó que en las siguientes semanas, Bennington había tenido una recaída con el alcohol.
Su familia y abogados decidieron mantener este incidente en secreto y no se reveló sino hasta después de su deceso en el 2017.
La banda sólo tocaba covers de canciones y esto emocionaba mucho a Chester debido a que le recordaba los tiempos donde tocaba música para divertirse y no para “trabajar”.
Durante el 2016, Chester se contactó con sus viejos amigos y les ofreció volver a grabar sus temas antiguos con una mejor tecnología.
Chester estaba buscando nuevas formas de mantenerse ocupado y obtener nuevos retos, porque sabía que mantenerse sin trabajar, era peligroso para él.
Mike Shinoda comentó que los días siguientes de la noticia, Chester no podía terminar las canciones de Linkin Park en las pruebas de sonido sin que se le quebre la voz.
Incluso cuando estaban al vivo, Chester dejaba que el público cante porque él no podía hacerlo por tanto dolor que sentía.
Sin embargo, el verdadero producto del álbum eran las letras, donde Chester aprovechó para expresar frases como: “Si me dejo ir, seré libre” en su canción “Heavy”.
Estas letras fueron un tortuoso resumen de cómo se sentía Chester en aquel entonces.
Era un álbum donde él exponía como se sentía y la gente odió el álbum, al punto de que lo acusaban de tratar de imitar “modas pop” para ganar dinero.
“Estoy teniendo un momento difícil en mi vida, cuando estoy “dentro de mi cabeza”, no me digo cosas lindas. Es como si hubiese otro Chester ahí dentro que quiere acabar conmigo. ”
Durante su última canción, Chester se bajó del escenario y comenzó a estrechar las manos de todos sus fanáticos. Algunos incluso lo abrazaron.
Fue un momento de agradecimiento a sus fanáticos.
Su esposa confesó que habían tenido vacaciones familiares y tenía planes con varios integrantes de sus múltiples bandas.
Chester no mostró signos de tristeza los últimos días. Lo que ocurrió fue totalmente inesperado.