Por más de 180 millones de años, la tierra estuvo reina por todo tipo de dinosaurios.
Pero en tantos años, existieron especies muy raras de las que muy poco se ha hablado. A continuación te las presentamos:
1. El Linhenykus apenas tenía brazos
Muchos chistes se han hecho sobre los pequeños brazos del Tiranosaurio Rex, pero el Linhenykus se lleva el premio al dinosaurio con los brazos más pequeños de la historia.
El Linhenykus apenas tenía un dedo en cada brazo y en ese dedo tenía una especie de garra.
La gran diferencia con el T-Rex es que el Linhenykus medía apenas 70 centímetros y usualmente se alimentaba de insectos.
2. El Halszkaraptor parecía un pato y reptil al mismo tiempo
Cuando la científica Andre Cau analizó el fósil encontrado del Halszkaraptor, pensó que era un conjunto de esqueletos de diferentes animales pegados en uno solo.
Pero luego de analizar cuidadosamente el fósil, determinaron que era genuino. El Halszkaraptor tenía la cabeza de un pato y el cuerpo de un reptil.
3. El Incisivosaurus tenía dientes ridículos
El Incisivosaurus era un dinosaurio muy parecido a un ave, pero era inconfundible por sus dientes incisivos exagerados.
Los científicos creen que sus dientes tenían una función muy parecida a los de los roedores para procesar los alimentos vegetales.
4. El Concavenator tenía problemas de espalda
El Concavenator fue encontrado en el 2003 y dejó impresionado a los científicos quienes no han determinado aún la función de esa protuberancia en la espalda.
Algunos sugieren que era un atractivo de reproducción, mientras que otros sugieren que era una forma de almacenar grasa.
5. El Pachycephalosaurus tenía un casco natural
El Pachycephalosaurus es famoso por tener un cráneo que era prácticamente indestructible, ya que tenía un espesor de 22 centímetros.
Los Pachycephalosaurus solían pelear a cabezazos para ganarse el derecho a reproducirse y aunque su cráneo aguantaba estos golpes, su columna vertebral terminaba lastimada por los impactos.
6. El Kentrosaurus ponía a los puercoespines en vergüenza
Los Kentrosaurus eran herbívoros, pero resultaban una gran amenaza para los carnívoros que intentaban devorarlo.
El Kentrosaurus contaba con picos resistentes y muy afilados en toda la espalda, pero los más afilados los tenía en la cola, que usaba para defenderse de cualquier depredador.
7. El Dineobellator, un dinosaurio lleno de plumas
El Dineobellator tenía un esqueleto de velociraptor pero lo curioso es que estaba cubierto con plumas, muy parecida a la de las águilas actuales.
El Dineobellator medía 2 metros y no pesaba más de 30 kilos.
8. El Therizinosaurus tenía las garras como el “Joven Manos de Tijera”
El Therizinosaurus ha sido comparado con el personaje ficticio de “El Joven Manos de Tijera”, ya que tenía garras con cuchillas muy afiladas que usaba para defenderse.
Sus garras son consideradas las más grandes en toda la historia animal.
