Estas familias son muy reconocidas debido a su éxito en la política y en el mundo de los negocios.
Pero lamentablemente su vida personal se ha visto plagada de malos momentos que han originado historias acerca de supuestas maldiciones.
En los años 40, tanto Joseph Kennedy Jr. y Kathleen Kennedy perecieron en accidentes aéreos, Rosemary Kennedy sufrió una lobotomía que la dejó impedida de por vida y tanto John F. Kennedy y Robert Kennedy fueron asesinados.
Esto obviamente es una leyenda antigua, pero cobró mucho sentido cuando la Princesa Grace pereció en un accidente automovilístico.
Su hija Stephanie quien sobrevivió al accidente, tuvo una vida amorosa llena de infidelidades.
Su otra hija Caroline perdió a su marido en un accidente de bote y luego se volvió a casar con un golpeador.
Sus hijos decidieron dedicarse a la lucha, pero uno de ellos, David, perdió la vida durante una gira mundial por mezclar alcohol y pastillas para dormir.
Mike Von Erich sufrió de problemas mentales repentinos y terminó recluido en un centro psiquiátrico.
Kerry Von Erich sufrió un accidente de motocicleta que le provocó la amputación de su pie, cayó en depresión y se quitó la vida.
Jack Von Erich sufrió de cáncer al poco tiempo y su madre pereció en el año 2015.
Kevin Von Erich es el único sobreviviente de esta numerosa familia.
Arthur tuvo 21 hijos de los cuales 11 perecieron antes de llegar a la edad adulta.
El resto de sus hijos terminaron alcohólicos y otros recluidos en psiquiátricos.
Sin embargo, el patriarca Agnelli perdió la vida en un accidente de avión, su tía Ancieta perdió la vida dando a luz y su hijo tuvo problemas con las drogas toda su vida.
Finalmente dos de los herederos sucumbieron al cáncer de estómago y pulmón.
Su hijo, Ernest Hemingway se volvió un famoso escritor, pero se quitó la vida a los 62 años, al igual que su hermano Leicester.
Su hermana Ursula Hemingway perdió la vida por una sobredosis y varios de sus nietos sufrieron problemas de alcoholismo.
La nuera de Getty sufrió una sobredosis y otro de sus hijos fue secuestrado por la mafia italiana.
Debido a todo este stress emocional, Getty sufrió una embolia que lo dejó parcialmente ciego e imposibilitado de hablar.